Piedra aprovechada

Tras la extracción en cantera de los bloques de piedra y su posterior manufactura en fábrica, tan solo se aprovecha un % del volumen total del bloque. Existen soluciones constructivas que suelen aprovechar el material desechado como son las fachadas de costeros y la construcción con gaviones (piedra enjaulada).
La primera solución constructiva de reciclado consiste en la utilización de costeros que son restos de la piel exterior e irregular de los bloques de piedra, que presentan una plasticidad y cromatismo con el que poder jugar en fachadas.
Tenemos obras a nuestro alrededor como el Rectorado de la Universidad de Vigo de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue y la Escuela de Altos Estudios Musicales de Antón García Abril, que han incorporado estas piezas de granito a su fachada haciendo que destaquen por su estética, densidad y composición.

CONSTRUCCIÓN CON GAVIONES

Los gaviones fueron ya utilizados por los romanos. En sus inicios, se construyeron muros de gaviones con mimbre trenzado y rellenos de piedra, con el propósito de proteger contra los desprendimientos de rocas. Todavía hoy, los gaviones rellenos de piedra, alineados y estibados, se utilizan para estabilizar taludes.

Actualmente su diversidad de uso se ha ampliado, multiplicando sus aplicaciones por la alta durabilidad del material (alambre de acero con galvanizado especial), por el montaje rápido y estable, y por las formas y acabados especiales.

Un gavión consiste en una caja de forma prismática rectangular, elaborada con enrejado metálico de mallas hexagonales, confeccionado con alambre galvanizado reforzado. Estos gaviones se llenan con canto rodado, piedra de cantera o material adecuado del que más a mano se disponga.

Además del gavión tipo, a base de malla de alambres de triple torsión, especialmente utilizado en obra pública, existen gaviones de otros tipos como pueden ser:

-De madera: realizados con perfiles de madera tratada, de sección circular o cuadrada, rellenos de piedra de las mismas características que la usada para los gaviones de malla.

-Rígidos: construidos con un enrejado de acero corrugado y galvanizado que los dota de una estética más rectilínea y esbelta.

-De colgar: formados por jaulas de alambre de acero galvanizado o inoxidable de 12 a 15 cm de espesor, convenientemente rellenos de piedra, que van colgados de perfiles atornillados al muro.